A Erre Te E

Hoy, una entrada de una filósofa frívola me ha dado qué pensar. Trataba un tema del que yo tengo una opinión bastante concreta, pero que hasta leer su post no me había dado cuenta de ésa opinión. Extraño...

El Arte.

Poca gente logra relacionar a Goya con Rothko, ambos pintores.

Hay quien se queda un día entero admirando a un bebé enorme de silicona mientras otros sólo ven un "Lego" en lo cuadros de Kandinsky. 

"¿Qué intentas explicar con éste cuadro?" me preguntan a veces, y yo me quedo con cara de oO *¿eignh?*

Para mí, el Arte está dentro de cada uno. 

Es imperdonable criticar una obra tachándola de "no-arte". El Arte es para quien quiera serlo.

Para mí, el Arte despierta sentimientos, sensaciones. El Arte cuenta cosas al que mira y le impide apartar la mirada queriendo saber más.

¡Lo irónico del asunto es que muchas veces el artista no intenta decirnos absolutamente nada! Pero ahí está la belleza y el misterio del Arte: si alguien que Crea lo hace sin pretensiones, sin ningún propósito oculto o historia que contar, y hay alguien ahí fuera que puede ver más allá de la obra, que puede oír su voz y ver su alma, estamos llamando Arte a la obra y Artista al creador.

El Arte es Arte si alguien dice que lo és.

Porque si para alguien un cuadrado negro sobre un fondo blanco le narra una historia que nunca había oído antes, ésa persona lo llamará Arte, y que se atreva quien quiera a decir lo contrario o criticarlo, porque nunca verá lo que esa persona ha visto.

Porque si tú algún día vas por la calle, y no sabes por qué un pegote de pintura blanca sobre la acera sucia parece tener una rara belleza que intenta decirte algo, no querrás que te llamen loco.

PD: para terminar con el Sermón, una chica con capa y mechas azules arriba, y una colegiala gotikorra abajo. Siempre quise ser gotikorra, pero me quedé en un cruce entre muchas tribus urbanas. Como todas, supongo :)